🏴‍☠️ El último botín del imperio británico: Cómo Londres robó 1.800 millones en oro venezolano... legalmente

Reino Unido confiscó 31 toneladas de oro venezolano reconociendo a Guaidó como presidente. Hoy Guaidó vive en Miami y el oro sigue en Londres. Robo legalizado.

De autoproclamado presidente a profesor en Miami: el oro sigue en Londres
El oro venezolano retenido en Londres: 31 toneladas – 1.800M$

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🔍 Introducción: Cuando los piratas necesitan jueces

El Banco de Inglaterra custodia 31 toneladas de oro venezolano, valoradas en 1.800 millones de dólares. Venezuela lo pidió de vuelta en 2018 para comprar medicinas y equipos médicos durante la pandemia. La respuesta británica fue demoledora: "No reconocemos a Nicolás Maduro como presidente". En su lugar, decidieron que Juan Guaidó, un político que nunca fue elegido presidente, era el "líder legítimo" de Venezuela. Cinco años después, la historia es obscena: Guaidó vive exiliado en Miami dando clases universitarias, su "gobierno interino" fue disuelto por la propia oposición venezolana en 2023, pero el Banco de Inglaterra sigue sin devolver el oro. Bienvenidos al siglo XXI, donde los imperios ya no necesitan barcos piratas. Solo necesitan jueces con peluca.

🎭 La autoproclamación: cuando Washington fabrica un presidente

23 de enero de 2019: el día que nació un "presidente"

Juan Guaidó tenía 35 años cuando se autoproclamó "presidente encargado" de Venezuela el 23 de enero de 2019. No había sido candidato presidencial. No había participado en elecciones presidenciales. Era simplemente presidente de la Asamblea Nacional, un cargo rotativo que le tocó por protocolo partidario. Su argumento legal era creativo: como la reelección de Maduro en 2018 fue "fraudulenta", Venezuela tenía un "vacío de poder". Y según el artículo 233 de la Constitución venezolana, ese vacío debía ser llenado por el presidente de la Asamblea Nacional: él mismo.

La gimnasia legal era absurda, pero Washington no necesitaba que tuviera sentido. Apenas 19 minutos después de que Guaidó se autoproclamara, Donald Trump lo reconoció como presidente legítimo. Luego se sumaron más de 50 países: Canadá, Brasil, Argentina, y crucialmente para esta historia, el Reino Unido.

Jeremy Hunt: el ministro que vendió a Venezuela

El entonces secretario de Asuntos Exteriores británico, Jeremy Hunt, visitó Washington el 24 de enero de 2019, un día después de la autoproclamación de Guaidó. Se reunió con Mike Pompeo y John Bolton, los arquitectos de la estrategia para derrocar a Maduro. Hunt declaró a la prensa: "El Reino Unido cree que Juan Guaidó es la persona adecuada para sacar adelante a Venezuela. Estamos apoyando a Estados Unidos, Canadá, Brasil y Argentina para que eso suceda".

Documentos desclasificados obtenidos por Declassified UK revelaron que Pompeo y Bolton agradecieron en privado a Hunt por esto. Pero la contribución británica fue mucho más allá de palabras diplomáticas. El 4 de febrero de 2019, Hunt emitió un comunicado oficial reconociendo a Guaidó como "presidente interino constitucional de Venezuela". Con ese documento, el Banco de Inglaterra tuvo su coartada legal para congelar el oro venezolano.

El Ministerio de Relaciones Exteriores británico se niega a revelar si sus funcionarios tuvieron conversaciones con sus homólogos estadounidenses sobre el oro venezolano desde 2019. En respuesta a solicitudes de Libertad de Información, argumentaron que "la cesión de información relacionada a este caso podría dañar nuestras relaciones con los Estados Unidos de América y Venezuela". Traducción: hicimos un trato sucio y no queremos que quede constancia.

💰 Las 31 toneladas atrapadas en las bóvedas de Londres

Mayo de 2020: Venezuela pide su oro para combatir la pandemia

En mayo de 2020, el presidente del Banco Central de Venezuela, Calixto Ortega, acusó al Banco de Inglaterra de violar el contrato al negarse a transferir 930 millones de euros (aproximadamente 1.000 millones de dólares) de las reservas de oro. El destino era claro y verificable: un fondo del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) para comprar medicinas, vacunas, alimentos y equipos médicos contra el coronavirus.

Venezuela incluso aceptó que fuera un tercero, el PNUD, quien administrara los fondos para garantizar transparencia. El Banco de Inglaterra se negó de todos modos. En 2021, la relatora especial de las Naciones Unidas sobre sanciones, Alena Douhan, instó al Reino Unido "y a los bancos correspondientes a descongelar los activos del Banco Central de Venezuela" para permitir la compra de bienes esenciales que garantizaran las necesidades humanitarias del pueblo venezolano.

La solicitud de la ONU fue ignorada. Con soberbia imperial, el Banco de Inglaterra llegó a pedir "garantías" de que el oro no sería usado para beneficio personal de Maduro o de altos cargos venezolanos sancionados. La humillación era deliberada: un banco privado exigiendo garantías sobre cómo un país soberano usaría su propio dinero. A pesar de esto, Venezuela aclaró que todo sería destinado a atender la pandemia. No fue suficiente.

La batalla legal: cuando los piratas contratan abogados

Guaidó creó una "Junta Directiva" paralela del Banco Central de Venezuela, nombrada por su Asamblea Nacional no reconocida por el Tribunal Supremo venezolano. Esta "junta directiva" fantasma, encabezada por Ricardo Villasmil, pidió al Banco de Inglaterra "en nombre" del BCV que no entregara el oro al gobierno de Maduro.

En julio de 2022, la jueza Sara Cockerill del Tribunal Superior de Londres falló a favor de Guaidó. Su argumento fue impecable en su circularidad: como el gobierno británico reconoce a Guaidó como presidente, el control del oro debe recaer en la junta designada por Guaidó. Cockerill dictaminó que no podía validar las sentencias del Tribunal Supremo de Justicia venezolano que revocaron los nombramientos de la junta de Guaidó, ya que "no existe base legal en el Reino Unido para hacerlo".

La vicepresidenta venezolana, Delcy Rodríguez, calificó la decisión de "realmente insólita" y "motivada políticamente". El Banco Central de Venezuela condenó el fallo como violación del contrato y señaló que autoridades de bancos centrales de otros países se habían comunicado preocupados por sus propias reservas en el Banco de Inglaterra. El mensaje era claro: si pueden hacerlo con Venezuela, pueden hacerlo con cualquiera.

🎪 El colapso de Guaidó: cuando el títere pierde sus hilos

2023: la oposición venezolana elimina el "gobierno interino"

Para 2022, el liderazgo de Guaidó se había erosionado completamente. En la práctica, nunca ejerció poder alguno dentro de Venezuela. El reconocimiento internacional le había dado acceso al manejo de ciertos activos, pero ningún control real sobre el territorio. En diciembre de 2020, el oficialismo recuperó la mayoría en la Asamblea Nacional, y Guaidó quedó sin base institucional.

El 30 de diciembre de 2022, tres de los cuatro principales partidos opositores votaron para eliminar el "gobierno interino": Primero Justicia, Acción Democrática y Un Nuevo Tiempo. El resultado fue 72 votos a favor, 29 en contra y 8 abstenciones. La justificación era brutal: el gobierno interino no cumplió con sus tres objetivos declarados: cesar la "usurpación" de Maduro, formar un gobierno de transición, y celebrar elecciones libres.

Guaidó calificó la decisión como un "salto al vacío" y una "capitulación". Argumentó que la función de presidente encargado "no es delegable, ni mucho menos evadible". Pero su queja era irrelevante: el 5 de enero de 2023, Dinorah Figuera fue electa como su sucesora, poniendo fin formal a su reclamo presidencial.

Abril de 2023: Guaidó huye a Miami

El 25 de abril de 2023, Guaidó fue expulsado de Venezuela al intentar entrar a Colombia para asistir a una conferencia internacional. Colombia consideró deportarlo de vuelta a Venezuela, pero finalmente lo exilió a Estados Unidos. Desde entonces vive en Miami, Florida, donde la Universidad Internacional de Florida lo contrató como profesor visitante en septiembre de 2023. Le pagaron 40.000 dólares por un semestre como "becario senior de liderazgo" en el Centro Adam Smith para la Libertad Económica.

El 6 de octubre de 2023, el fiscal general venezolano Tarek William Saab emitió una orden de captura con alerta roja de Interpol contra Guaidó. Los cargos: traición a la patria, asociación para delinquir y legitimación de capitales. Saab acusó a Guaidó de haberse beneficiado de fondos de Monómeros y Citgo, y de que sus acciones costaron a Venezuela 19.000 millones de dólares.

Durante todo este tiempo, Guaidó pagó sus costos legales británicos extrayendo millones de dólares de activos venezolanos inicialmente confiscados por el gobierno estadounidense. En otras palabras: intentó robar activos estatales venezolanos usando activos estatales venezolanos robados. La ironía es tan perfecta que casi parece ficción.

Estados Unidos deja de reconocer a Guaidó... pero el oro no se mueve

El 4 de enero de 2023, un alto funcionario del Departamento de Estado confirmó a Axios que Estados Unidos dejó de reconocer a Guaidó como presidente interino. La declaración fue diplomáticamente confusa: "La Asamblea Nacional de 2015 reconoce a Guaidó como uno de sus miembros, no como Presidente Interino, ya que el Gobierno Interino ya no existe. Así que seguimos su ejemplo".

El portavoz del Consejo de Seguridad Nacional, John Kirby, fue aún más ambiguo: Estados Unidos seguiría coordinándose con Guaidó y "otros líderes democráticos que piensan parecido". Pero cuando se le preguntó directamente si aún lo reconocían como presidente, evitó responder.

¿Y el Reino Unido? Sorprendentemente, Londres siguió reconociendo a Guaidó incluso después de que la UE y varios países latinoamericanos dejaran de hacerlo. En julio de 2021, el abogado que representaba al Ministerio de Exteriores británico, James Eadie, confirmó que desde febrero de 2019 Londres "solo" reconocía a Guaidó como "el único individuo al que se reconoce la autoridad para actuar en nombre de Venezuela como jefe de Estado".

El revival británico del reconocimiento a Guaidó en julio de 2021 parecía menos un intento de derrocar a Maduro y más una maniobra para apurar la decisión del Alto Tribunal sobre no devolver el oro. La decisión llegó después de que la UE, Brasil, Colombia y Argentina habían dejado de reconocer a Guaidó. El timing era sospechoso.

🏴‍☠️ Precedente peligroso: cuando robar se convierte en jurisprudencia

El fantasma de las reservas libias

Para el gobierno inglés, quedarse con reservas internacionales de otro país no es algo nuevo. Lo hizo de facto hace años con las reservas libias durante el conflicto que derrocó a Muammar Gaddafi. Pero el caso venezolano es más grave porque la expropiación no será solo de facto: será jurídicamente respaldada.

Si el Alto Tribunal británico termina fallando definitivamente a favor de la posición de su gobierno, generará una jurisprudencia peligrosa que pone en peligro las reservas internacionales de decenas de países. El mensaje es claro: si tu gobierno no le gusta a Londres o Washington, pueden congelar tus activos y reconocer a cualquier opositor como tu "verdadero líder". Y de repente, tu dinero ya no es tuyo.

Ni siquiera a los nazis les hicieron esto

El primer ministro belga Bart De Wever, en el contexto del debate sobre los activos rusos congelados, recordó que "ni durante la Segunda Guerra Mundial se llegó a confiscar el dinero de la Alemania nazi". Dejemos que eso cale: la comunidad internacional mostró más respeto por las reservas del Tercer Reich que por las de Venezuela.

La Corte Internacional de Justicia dictaminó en 2012 que los bienes soberanos están protegidos incluso en casos extremos, como indemnizaciones por crímenes de guerra. Usar activos estatales congelados sin sentencia judicial viola la inmunidad soberana, un principio fundamental del derecho internacional.

Pero cuando eres el Banco de Inglaterra y tu gobierno necesita una victoria geopolítica para Washington, aparentemente el derecho internacional se vuelve opcional.

💭 Reflexión final: La piratería con toga

El caso del oro venezolano no es sobre Maduro vs Guaidó. No es sobre democracia vs dictadura. Es sobre cómo las potencias occidentales manipulan el sistema legal internacional para robar activos soberanos cuando les conviene.

La secuencia es obscena en su claridad:

  1. Estados Unidos decide que no le gusta el presidente de Venezuela
  2. Washington fabrica un "presidente alternativo" que nunca fue elegido
  3. Reino Unido reconoce al presidente fabricado
  4. Un juez británico usa ese reconocimiento para congelar el oro
  5. El "presidente" fabricado colapsa, huye a Miami, pierde todo apoyo
  6. Estados Unidos deja de reconocerlo como presidente
  7. El oro sigue en Londres

¿Ven el truco? Una vez que el oro está congelado, ya no importa si el pretexto original desaparece. El Banco de Inglaterra puede inventar nuevas justificaciones indefinidamente. "Dudas sobre la legitimidad del gobierno", "inestabilidad política", "preocupaciones sobre corrupción". Siempre hay una excusa cuando necesitas una.

Bancos centrales de otros países se comunicaron con Venezuela expresando preocupación por sus propias reservas en el Banco de Inglaterra. Entienden perfectamente el mensaje: hoy es Venezuela, mañana podrías ser tú. Si depositas tus reservas en Londres o Nueva York, solo son tuyas mientras tus políticas agraden a Washington.

La época de los bucaneros, corsarios y piratas que operaban para "Su Majestad" robando oro en alta mar no terminó. Solo cambió de forma. Ahora los piratas usan toga, hablan en términos legales, y justifican sus robos citando "preocupaciones democráticas". Pero un atraco con documentos legales sigue siendo un atraco.

La diferencia es que este necesita más páginas de justificación. Y un buen departamento de relaciones públicas.


🔥 ¿Y tú qué opinas?

¿Crees que Reino Unido tiene derecho a retener oro que Venezuela depositó en custodia? ¿Es legítimo que un país decida quién es el presidente de otro y use ese reconocimiento para confiscar activos?

¿Sabías que Guaidó nunca fue candidato presidencial, se autoproclamó presidente, y ahora vive en Miami dando clases? ¿Te parece que Estados Unidos y Reino Unido pueden fabricar "presidentes alternativos" según sus intereses?

¿Es este un precedente peligroso para el sistema financiero internacional? Si tu país deposita reservas en bancos occidentales, ¿siguen siendo tuyas si tus políticas no les agradan?

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Objetivo del post: Exponer la hipocresía de las potencias occidentales en su trato con Venezuela, revelar cómo se manipulan mecanismos legales internacionales para confiscar activos soberanos, generar indignación fundamentada sobre el doble estándar del derecho internacional, posicionar el blog como referente en análisis crítico de política exterior occidental hacia América Latina, y atraer audiencia interesada en perspectivas anti-imperialistas documentadas con fuentes verificables.


Nota editorial: Este artículo forma parte de la serie "Mentiras que hicieron historia", donde revisamos los mitos que siguen vivos en la educación formal y popular.

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