📍 Cuando una mentira justificó una guerra… y desestabilizó una región entera
En 2003, el gobierno de Estados Unidos, liderado por George W. Bush, afirmó que Irak poseía armas de destrucción masiva (ADM).
La acusación fue respaldada por el Reino Unido, bajo Tony Blair, y presentada ante la ONU como una amenaza global.
La realidad: no existían tales armas.
La consecuencia: una guerra que dejó más de 500.000 muertos, millones de desplazados, y el surgimiento de ISIS.
🔥 ¿Qué se dijo?
- Que Saddam Hussein tenía armas químicas, biológicas y nucleares listas para usar.
- Que Irak estaba vinculado a Al Qaeda y al terrorismo global.
- Que la invasión era preventiva y necesaria para proteger al mundo.
“Las pruebas son irrefutables.”
🧨 ¿Qué se sabía realmente?
- La CIA tenía informes contradictorios y sin verificación.
- El principal testigo, “Curveball”, era un informante falso.
- Los inspectores de la ONU no encontraron evidencia de ADM.
- El informe británico “Dodgy Dossier” fue plagado de plagios y exageraciones.
“No había armas. No había amenaza. Solo había una decisión política.”
🕯️ ¿Y las consecuencias?
- Más de 500.000 muertos entre civiles y combatientes
- Más de 4 millones de desplazados
- El colapso del Estado iraquí
- El surgimiento de ISIS en el vacío de poder
- La pérdida de credibilidad de EE.UU. y Reino Unido ante el mundo
“La guerra de Irak fue el mayor error estratégico de Occidente en el siglo XXI.”
— The Guardian
📌 Reflexión final
La guerra de Irak fue una mentira institucionalizada.
Fue una invasión basada en pruebas falsas, miedo fabricado y ambiciones geopolíticas.
Y fue una tragedia que aún define el caos en Medio Oriente.
Comentarios
Publicar un comentario