Episodio 9 — La Guerra de los Pasteles

Los conflictos que nunca llegaron a los libros de texto

Episodio 9 — La Guerra de los Pasteles

Una intervención francesa disfrazada de reclamo económico para imponer poder en México.

Buques de guerra franceses frente a la costa mexicana durante la intervención conocida como la Guerra de los Pasteles
Buques franceses frente a la costa mexicana — La Verdad Compartida

En 1838, México enfrentó una de las intervenciones más absurdas y reveladoras de su historia: la llamada Guerra de los Pasteles. Aunque el nombre suena casi cómico, el trasfondo fue una demostración de fuerza imperial disfrazada de reclamo económico.

El conflicto comenzó cuando un pastelero francés, Monsieur Remontel, exigió una compensación por daños sufridos en su negocio durante disturbios en México. Francia utilizó este reclamo —junto con otras demandas económicas— como pretexto para presionar a un país joven, inestable y debilitado tras su independencia.

La monarquía de Luis Felipe envió una flota militar que bloqueó puertos mexicanos y bombardeó la fortaleza de San Juan de Ulúa. La desproporción era evidente: un imperio europeo atacando a una nación en formación por una supuesta deuda menor.

México, con recursos limitados y un gobierno dividido, intentó resistir. Entre los defensores destacó Antonio López de Santa Anna, quien perdió una pierna durante el conflicto y más tarde convertiría ese episodio en parte de su narrativa política.

Finalmente, México aceptó pagar la indemnización exigida para detener la agresión. La guerra dejó claro que los reclamos económicos podían convertirse en herramientas de intervención y que las potencias europeas estaban dispuestas a usar la fuerza para imponer su voluntad.

¿Cuántas veces más un conflicto menor ha sido inflado para justificar la ambición de una potencia extranjera?

Comentarios